¿Por qué aparecen esas molestas bolitas bajo los brazos y a los lados pocas veces después de usar ese suéter que te acaban de regalar? Las bolitas se forman cuando las fibras se rompen, se separan y luego se agrupan. Las bolitas pueden formarse en lana, algodón, casimir e incluso en prendas de poliéster, generalmente en un lugar en donde dos telas se frotan entre sí.
Lava a la manera profesional.
Para evitar las bolitas, voltea el suéter de adentro hacia afuera antes de lavarlo, en el ciclo suave o a mano, usando detergente Ariel Líquido Concentrado Regular. Es mejor secar el suéter al aire, dejándolo sobre una superficie plana. Puedes hacer esto para asegurarte de que no se estire: luego de lavar, coloca el suéter sobre una toalla en una superficie plana y enrolla la toalla y el suéter desde el borde más cercano a ti. Esto exprimirá el exceso de agua. Desenrolla la toalla, levanta el suéter y colócalo sobre una toalla seca en una superficie plana. Asegúrate de darle la forma original al suéter con cuidado.
Quita las bolitas correctamente.
Si el suéter ya tiene bolitas, tendrás que ser paciente y quitarlas una a la vez. Coloca la prenda sobre una superficie plana y utiliza unas tijeras pequeñas o una rasuradora para quitar cuidadosamente las bolitas. Si te preocupa dañar el suéter, puedes buscar otros recursos y utilizar algo que levante las bolitas del suéter, como un peine de dientes finos, una piedra pómez o incluso un rallador de fruta. También existen aditamentos especiales que están diseñados para quitar las bolitas sin dañar las fibras de la prenda. Considera comprar un peine para suéteres o una rasuradora eléctrica para telas que funciona con baterías y que por lo general no son tan costosas. Será útil no solo para los suéteres, sino también para las bolitas que se acumulan en las sábanas y colchas de lana, toallas, muebles e incluso en la cama del perro. También puedes quitar de manera segura pelo de mascotas, hilos sueltos y pelusa, haciendo que las telas de las prendas se vean como nuevas.